Misiles a 25 kilómetros de la OTAN
En el sur, en el paso fronterizo fluvial con Rumanía, sobrevive un pequeño duty free , quizá el último de Ucrania: perfumes, tabaco y alcohol a buen precio.
Duty free en la frontera sur y misiles en la frontera norte: los proyectiles rusos provocaron la madrugada de ayer una matanza a menos de 25 kilómetros de la frontera con Polonia: el ataque ruso que más cerca ha estado de un país de la OTAN.
Fueron más de treinta misiles lanzados por cazabombarderos rusos contra una base crucial para la cooperación entre Ucrania y la Alianza Atlántica, y donde se entrenan cientos de voluntarios extranjeros.
El ataque a la base, cerca de Yavoriv, mató al menos a 35 “héroes” e hirió a 134, según el gobernador Lviv, Maksim Kozytskyi. “El ataque aéreo se llevó a cabo desde el mar Negro y el mar de Azov. Los aviones despegaron del aeropuerto de Saratov”, precisó.
Kyiv habla de “héroes” y Moscú, de “mercenarios”.
El portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Igor Konashenkov, confirmó el ataque y elevó la cifra de víctimas. “Hasta 180 mercenarios extranjeros y sus centros de entrenamiento, así como un gran lote de armas extranjeras, han sido destruidos en instalaciones militares de la región de Lviv”, aseguró Konashenkov.
“El régimen de Kyiv –añadió el portavoz ruso– estableció centros de coordinación de entrenamiento y combate para mercenarios extranjeros antes de ser desplegados en las áreas de combate para luchar contra los militares rusos, así como un depósito de almacenamiento de armas y equipos militares enviados a esas instalaciones por países extranjeros”.
Rusia ya advirtió el sábado que los convoyes de armamento occidental destinados a los ucranianos serían considerados por el ejército ruso objetivos militares legítimos.
Los cazabombarderos rusos también lanzaron ayer un ataque contra el aeropuerto de la ciudad de Ivano-Frankivsk, a menos de 150 kilómetro de Rumanía y a 250 de Hungría, dos países que –como Polonia– son miembros de la OTAN.
Tras el ataque, Jake Sullivan, asesor de seguridad de la Casa Blanca, advirtió a los rusos que la OTAN responderá si los proyectiles rusos impactan en algún país de la organización atlántica, aunque sea accidentalmente. Sullivan recordó que el presidente Joe Biden “ha dejado claro, repetidamente, que Estados Unidos trabajará con nuestros aliados para defender cada palmo del territorio de la OTAN, y cada palmo significa cada palmo”.
La base bombardeada acogió hace un tiempo a instructores militares de la OTAN, pero la organización atlántica aseguró ayer que ya no tiene a nadie de su personal en Ucrania. Estados Unidos sí ha incrementado el número de sus tropas desplegadas en Polonia.
De momento, por el cielo de la OTAN ya sobrevelan grandes drones descontrolados procedentes de esta guerra. La aeronave no tripulada de origen ruso que se estrelló la noche del pasado miércoles en Zagreb procedente de Ucrania –tras sobrevolar Rumanía, Hungría y Croacia– llevaba una carga explosiva, informó ayer el ministro de Defensa croata.
Hasta ahora no se ha podido determinar cuál es el origen del aparato de seis toneladas, si del bando ruso o del ucraniano: ambos niegan haberlo lanzado. Los técnicos han recuperado la caja negra y esperan obtener información en los próximos días.
Las negociaciones entre rusos y ucranianos para buscar un alto el fuego continuarán este lunes en formato de videoconferencia, informó el Kremlin. Tanto rusos como ucranianos han dejado caer en los últimos días que ha mejorado algo el clima de las negociaciones, pero lo único cierto es que la invasión rusa continúa y la cifra de víctimas no deja de crecer.
Hasta ahora no se ha podido determinar cuál es el origen del aparato de seis toneladas, si del bando ruso o del ucraniano: ambos niegan haberlo lanzado. Los técnicos han recuperado la caja negra y esperan obtener información en los próximos días.
Las negociaciones entre rusos y ucranianos para buscar un alto el fuego continuarán este lunes en formato de videoconferencia, informó el Kremlin. Tanto rusos como ucranianos han dejado caer en los últimos días que ha mejorado algo el clima de las negociaciones, pero lo único cierto es que la invasión rusa continúa y la cifra de víctimas no deja de crecer. (La Vanguardia)