La deficiencia de vitamina D, un riesgo para la severidad de la COVID
Artículo del blog Cierta Ciencia, de la bióloga y genetista Josefina Cano, que recomendamos por su interés.
A pesar de lo mucho que se conoce sobre la acción del coronavirus en quienes infecta, a medida que los estudios prosperan, ese conocimiento sigue creciendo a diario, facilitando tratamientos y recuperaciones.
Como ya es sabido, el virus no afecta a todos por igual, con un porcentaje de entre un 30 a un 40 por ciento que permanecen asintomáticos y otro 30-40 por ciento que muestran síntomas leves. Solo algo menos del 15 por ciento de los casos acaban en enfermedades graves. El qué vuelve a la enfermedad cuando se desarrolla, más severa o más leve se ha atribuido a la edad, el padecer diabetes, la obesidad, o la hipertensión. Pero ahora, una revisión profunda de la literatura, postula la hipótesis de que los niveles de la vitamina D juegan un papel significativo en la severidad de la COVID-19.
La vitamina D, entre las múltiples funciones que desempeña tiene a su cargo el mantenimiento eficiente del sistema inmune, participa en controlar la producción de las citoquinas, moléculas que regulan la respuesta inmunitaria. Las hay que promueven la inflamación o las que la inhiben. La vitamina D inhibe el sistema inmune adaptativo, el que responde primero a una invasión de patógenos y en el caso del coronavirus puede desencadenar lo que se conoce como “tormenta de citoquinas”, con graves efectos. La vitamina D promueve la acción del sistema inmune innato, balanceando así la respuesta inmunitaria y dando como resultado final una respuesta antiinflamatoria.
Para este estudio, los investigadores realizaron un seguimiento de seis semanas a individuos infectados entre 30 y 60 años de edad. Fueron separados en dos grupos: asintomáticos (grupo A) y enfermos con síntomas graves (grupo B). Fueron 91 personas en el primero y 63 en el segundo. Aunque en ambos grupos se detectaron deficiencias en la vitamina D, los análisis estadísticos fueron muy claros al mostrar diferencias entre los grupos.
Los autores encontraron que la deficiencia en la vitamina D es muy notoria en los pacientes que han necesitado ingresar a cuidados intensivos, con un riesgo mayor de mortalidad. De igual manera estos pacientes mostraron niveles más altos de químicos que indican inflamaciones severas.
Este trabajo es hasta hoy el primero y el más riguroso al momento de estudiar pacientes de Covid, asintomáticos o con síntomas graves y establecer una relación entre ellos y sus niveles de vitamina D en suero. De igual manera se estudiaron otros marcadores de inflamación.