Revelan varios contactos de Evo, Montaño, Romero y dirigentes del MAS con implicados en caso respiradores

La Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) presentó este jueves las pericias realizadas a los teléfonos celulares del exdirector jurídico del Ministerio de Salud, Fernando Valenzuela, y del denominado “testigo clave”, Luis Fernando Humerez, las cuales revelaron que dichos implicados, previamente al escándalo de presunta corrupción del caso respiradores, sostuvieron contactos con el expresidente Evo Morales, los exministros Carlos Romero y Gabriela Montaño, autoridades locales de Cochabamba y altos dirigentes del Movimiento Al Socialismo (MAS). 

“Queremos presentar al pueblo de Bolivia un estudio que ha realizado la FELCC, estudio científico, forense, sobre los celulares del principal sindicado, el señor Valenzuela en el polémico caso de los respiradores, llamado caso de corrupción, a mi criterio después de ver este estudio, en lugar de ser un caso de corrupción es un caso de conspiración contra la presidenta Jeanine Áñez”, manifestó Murillo.     El director nacional de la FELCC, coronel Iván Rojas, presentó los resultados de las pericias realizadas a los celulares de Valenzuela y Humerez.

El jefe policial inició la presentación describiendo las conversaciones vía WhatsApp que sostuvo Valenzuela, a través de dos líneas (Entel y Viva), con las siguientes personas: una funcionaria del Ministerio de Salud; el cónsul de Bolivia en Barcelona, Alberto Pareja; Roberto Velasco, funcionario de la Agencia de Infraestructura Médica y Equipamiento Médico (AISEM); Geovanni Pacheco, exdirector de la AISEM; Marcelo Navajas, exministro de Salud; y con Luis Fernando Humerez.   
Días previos a su detención, Valenzuela también tuvo contactos con Humerez, Luis Fernando Vía Cabero (ex oficial mayor de la Cámara de Diputados y exjefe de planificación de la exministra de Salud, Gabriela Montaño) sobre la situación de la emergencia sanitaria por causa del coronavirus (Covid-19) en el país. También sostuvo conversación con Carlos Rodrigo Montaño, hermano de la exministra de Salud.
“Valenzuela: Hermano estoy jodido han intervenido mis teléfonos, tienen sospechas jodidas que sigo ayudando y en contacto con ustedes; el otro día tuve una reunión con Murillo, quien me amenazó con cárcel. Carlos Rodrigo Montaño: Y… sabíamos que podía pasar, no sé cómo es tú situación, pero creo que hay que organizar las alternativas de salida”, dio lectura el director de la FELCC a una conversación vía WhatsApp entre Valenzuela y Carlos Rodrigo Montaño.
Además, Rojas detalló hubo varias conversaciones posiblemente vía Telegram entre Valenzuela y Gabriela Montaño, y horas antes de la aprehensión del exdirector del Ministerio de Salud, ambos sostuvieron una conversación durante 16 minutos.

Respecto al flujo de llamadas de Humerez, este ciudadano habría realizado 5.800 llamadas del 1 de enero al 19 de mayo de este año, entre las cuales sostuvo contacto con distintas altas exautoridades, autoridades locales y dirigentes del MAS.
Humerez, además de contactarse con Valenzuela, también hizo y recibió varias llamadas de alcaldes y de la gobernadora de Cochabamba, Esther Soria; el dirigente y candidato a senador del MAS, Andrónico Rodríguez; el vicepresidente del MAS, Orlando Zurita; Rimer Agreda, expresidente del MAS en Cochabamba; con el exministro de Salud, Aníbal Cruz; el exabogado de Gabriela Zapata, Walter Zuleta; empresarios, entre otros.
“En el lapso de tiempo anterior al 4 de mayo que es la última llamada que realiza el señor Humerez al señor Evo Morales, son 19 oportunidades en las que se comunican y el señor Evo Morales en 10 oportunidades realiza llamadas al señor Humerez. Del mismo modo encontramos que en 14 oportunidades el señor Humerez realiza llamadas a Carlos Romero  y Romero realiza llamadas en 6 oportunidades”, señaló el coronel Rojas.
Para el Gobierno, estos contactos entre exautoridades y dirigentes del MAS con los implicados del caso respiradores, demuestra que no hubo corrupción sino una “conspiración” detrás del hecho.
Ayer la Fiscalía, que investiga sobre la presunta compra irregular por sobreprecio de 170 respiradores a través de una empresa intermediaria en España, dio a conocer que se desmantelaron los kits de dichos equipos para inflar los precios de los mismos y repartir las ganancias entre funcionarios del Ministerio de Salud, entre los que se hallan los sindicados ahora de «conspiración«. (ANF)