Desesperación de las familias de los mineros atrapados en México
Diez mineros continúan atrapados e incomunicados en una mina de carbón desde el miércoles 3 de agosto cuando los habitantes de la población de Agujita, en el municipio mexicano de Sabinas (Coahuila), avisaron del colapso de uno de sus yacimientos con trabajadores en el interior. La Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) informó que el pasado sábado se introdujo una cámara en el pozo 4 para comprobar el estado de la misma. El desastre ocurrió cuando los mineros se toparon con un área contigua llena de agua que, al derrumbarse, inundó la mina por su cercanía con el río Sabinas. Más de 400 soldados del Ejército junto con Protección Civil luchan para extraer el agua con bombas para que los buzos rescatistas puedan acceder.
La situación es extrema y el domingo el presidente Andrés Manuel López Obrador se trasladó a Coahuila para supervisar los trabajos de rescate y reunirse con los familiares de los afectados. El mandatario mexicano quiso calmar los ánimos: «Siempre vamos a estar con ustedes, el Gobierno que yo represento siempre les apoya completamente». Las labores de rescate se complicaron por la posible inundación de la zona y los familiares amenazaron con rescatarlos ellos mismos si los buzos oficiales no lo hacen. Desde el miércoles se lograron reducir unos 9,5 metros de agua de un total de 34 tras haber cavado algunos canales para extraer el agua. Mientras tanto, la Fiscalía General de la República (FGR) ha abierto un procedimiento de investigación y solicitado el registro de los trabajadores en el Instituto Mexicano del Seguro Social.
El caso de Ruiz Loredo
El estado de los mineros es una incógnita. Ya han transcurrido las 72 horas que los expertos consideran vitales para la supervivencia de los trabajadores ante el colapso de una estructura y quedarse atrapado en su interior. Aunque hay casos excepcionales como el de Plutarco Ruiz Loredo, que logró sobrevivir durante una semana al derrumbe de la mina de Pinabete, de características similares a la de Sabinas. Ruiz Loredo permaneció cobijado una semana con el cadáver de un compañero que falleció el primer día mientras sus compañeros lograron escapar con vida. Ahora, su yerno es uno de los atrapados en Sabinas.
Respecto a la posibilidad de que los diez mineros continúen con vida, Ruiz Loredo dijo que «si tuvieron la misma oportunidad que yo tuve, habrá supervivientes», ya que consiguió permanecer con vida en la más absoluta oscuridad arrastrándose a las partes más altas y estrechas de la mina para no perecer ahogado. Los accidentes con derrumbes suelen ser frecuentes en esta cuenca minera de carbón como el ocurrido en la mina de Múzquiz, también en Coahuila, en el que murieron siete trabajadores en julio de 2021. Sin embargo, el mayor desastre acaeció en febrero de 2016 cuando una explosión de gas en la mina de Pasta de Conchos se llevó por delante a 65 mineros de los que sólo se consiguió rescatar dos cuerpos. (ABC.es)