Bolívar pasó del susto al gusto, se esforzó y capitalizó una victoria que lo permite soñar con pasar a los cuartos de final de la Copa Libertadores. La Academia venció por 3-1 a Atlético Paranaense, anoche, en el estadio Hernando Siles.
Fue una fiesta, pero con bastantes emociones. De perder pasó a ganar y con amplia supremacía en el juego contra los brasileños. Pese a que la zona defensiva sigue siendo un dolor de cabeza para los dirigidos de Beñat San José, Bolívar supo ganar el lance de anoche y estar con ventaja de dos goles para el cotejo de vuelta, el próximo martes (20:00) en Brasil.
EL PARTIDO
Desde el inicio se vio a intenso, pero nervioso Bolívar. Los celestes se acercaron al arco brasileño con apuros, todo debido a que presentaron cuatro hombres en la delantera con Bruno Savio, Francisco Da Costa, Ronnie Fernández y Patricio Rodríguez.
Los descuidos fueron evidentes en defensa, ya que en los 10 minutos, Vitor Roque encontró la pelota, amagó y eliminó a José Sagredo; pasó a su compañero Erick, quien tras darse la vuelta y sorprender a Nicolás Ferreyra y Gabriel Villamil, marcó el 1-0.
Fue un balde de agua fría para Bolívar, quienes no bajaron los brazos y pudieron anotar el empate poco después. A los 13’, un contragolpe permitió que Fernández llegue sólo al arco contrario. Su lucha fue evidente, venció a dos defensores y al golero rival, 1-1.
Bolívar estuvo envalentonado. Hubo conexión en la delantera celeste a tal punto de contar con varias chances. Y así fue en el segundo tanto, a los 27’, tras una serie de pases entre Da Costa y Fernández. La pelota llegó a Diego Bejarano, quien con un remate cruzado anotó el 2-1.
La Academia se fue al descanso con este resultado. En la segunda parte sufrió y se le acabaron las ideas por mayor parte del segundo tiempo. Lo más cercano fue un remate de Leonel Justiniano que pegó en el travesaño. Empero, pese a las dificultades, el ingreso de Javier Uzeda y Miguel Villarroel ayudó para la fluidez ofensiva.
Fue a los 76’ donde Bolívar volvió a sonreír y donde Beñat San José pego saltos de júbilo. Sagredo mandó un centro a Fernández, quien pegó un espectacular salto para marcar su segundo gol y el 3-1 para Bolívar.

APUNTES

MOSAICO
La hinchada de Bolívar se organizó para realizar un mosaico para recibir a sus jugadores. Lo cumplió con los colores del equipo, pero sólo se pudo ver con claridad el año «1925»; la otra figura se vio apenas. No obstante, fue una buena iniciativa por la hinchada académica.
ALGUNOS PROBLEMAS
Antes del partido, los accesos al estadio se complicaron por las nuevas disposiciones de la organización. Hubo grandes filas para entrar al Siles, lo cual hizo que algunos entraran tarde al lance.
CLAURE
El presidente de Bolívar, Marcelo Claure se dio cita al estadio y pudo ver el lance acompañado de su familia.
BEÑAT ODIADO Y QUERIDO
Hubo una gran división entre los hinchas celestes. Algunos pidieron la salida de Beñat San José; otros lo aplaudieron. (El Diario)

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