Gafas para ver en la oscuridad
Los actuales sistemas de amplificación de luz ambiental para poder ver en lugares demasiado oscuros para el ojo humano desnudo son voluminosos y caros. La invención de una singular película ultradelgada podría permitir en un futuro no muy lejano reemplazar esos engorrosos aparatos por unas gafas con la misma montura convencional de unas de sol o graduadas.
Este notable avance tecnológico es obra del equipo de Rocio Camacho Morales, de la Universidad Nacional Australiana (ANU). «Hemos hecho visible lo invisible”, enfatiza la investigadora.
Todo apunta a que esta nueva tecnología para ver con claridad en la oscuridad revolucionará este campo.
Las nuevas gafas podrían utilizarse no solo para operaciones militares y policiales, sino también para hacer más segura la conducción nocturna así como para caminar sin riesgo a tropezar por lugares poco iluminados.
En el caso de los usos por parte de las fuerzas de seguridad, que emplean a menudo la amplificación de luz para ver de noche o en sitios oscuros, las nuevas gafas serán más fáciles de usar y más seguras, reduciendo la incidencia de lesiones en el cuello provocadas por los dispositivos de visión nocturna actuales.
La nueva tecnología es capaz de transformar la luz infrarroja, normalmente invisible para el ojo humano, y convertirla en imágenes que el usuario puede ver claramente.
La clave es la película, formada por cristales a escala nanométrica, cientos de veces más pequeños que el grosor de un cabello humano, que pueden aplicarse a los cristales de unas gafas y actuar como un filtro, permitiendo ver en la oscuridad.
El dispositivo es extremadamente ligero, barato y fácil de producir en cantidades industriales, lo que lo hará accesible al público en general.
Actualmente, los dispositivos de alta gama que captan de imágenes infrarrojas y las convierten en imágenes de luz visible requieren para funcionar mantener algunos de sus componentes a temperaturas bajísimas (criogénicas) y su fabricación es costosa. En cambio, la nueva tecnología funciona a temperatura ambiente.
Hasta donde saben los científicos de la Universidad Nacional Australiana, es la primera vez en el mundo que la luz infrarroja se transforma con éxito en imágenes visibles en una pantalla tan delgada.
Aunque el primer prototipo de las gafas sirve solo para demostrar la validez del concepto, el equipo de investigación y desarrollo ya trabaja activamente para perfeccionar la tecnología y crear un primer modelo apto para el mercado. (Fuente: NCYT de Amazings)