María Fernanda Espinosa: La humanidad vive una crisis de corte civilizatorio
La excanciller ecuatoriana María Fernanda Espinosa, quien fue presidenta general de la Asamblea General de la ONU, considera que la humanidad vive una crisis de “corte civilizatorio”, un contexto en el que se debe revitalizar la relación de la Unión Europea con América Latina y el Caribe.
“La humanidad está viviendo una crisis de corte civilizatorio. No solamente es la crisis climática, la crisis de extinción; es también la crisis financiera y económica porque el sistema ya no da para más. Es una crisis de valores, de seguridad planetaria”, dice Espinosa en una entrevista con EFE en Cartagena de Indias.
La expresidenta de la Asamblea General de Naciones Unidas considera que hay “un reacomodo en el poder en la actualidad”.
Se requiere que “América Latina y Europa definan qué espacio quieren tener en ese mundo complejo, en ese mundo lleno de desafíos”.
Esto porque ambas regiones viven un momento difícil, en palabras de Espinosa, que cree que América Latina vive una situación:
“Muy dura de desaceleración del crecimiento económico, de incremento de la pobreza y la desigualdad”, así como “una crisis” de los “sistemas democráticos”.
“Pero también en Europa no la están pasando del todo bien, hay que decir la verdad. Hay una gran presión en el tema de su propia transición energética por la dependencia de petróleo y gas de Rusia, los reacomodos, las tensiones entre países e incluso por las diferentes miradas y perspectivas por la guerra en Ucrania”, añade María Fernanda Espinosa.
Reconstruir la agenda común
Para Espinosa, este es el momento perfecto para “relanzar las relaciones birregionales” entre Europa y América Latina y el Caribe.
“Hemos tenido una pausa, un letargo, desde la última Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños y la Unión Europea (Cumbre Celac-UE), que fue en el año 2015 y hay muchas cosas que han pasado, tanto en América Latina como en la Unión Europea: cosas buenas y cosas no tan buenas”, expresa.
En ese sentido, la tercera Cumbre Celac-UE, entre el 17 y el 18 de julio en Bruselas, tiene como objetivo tratar “de reconocerse, de volver a construir una agenda común, de volver a identificar las prioridades de ambas partes, a procesar los desacuerdos y los disensos, que los hay”.
“Hay que entender que ni América Latina y el Caribe ni la Unión Europea son espacios monolíticos, no es una relación entre dos iguales. Entonces es un desafío, pero es un desafío interesante, necesario, para activar el diálogo político, construir una agenda de mínimos entre ambas regiones”, añade María Fernanda Espinosa, que también fue ministra de Defensa entre 2012 y 2014.
Buen momento para la integración: María Fernanda Espinosa
Pese a las crisis que mencionó, María Fernanda Espinosa considera que este es un buen momento para “la integración latinoamericana”.
“Hay un proceso de afianzamiento de la Celac. Hay que esperar que la Celac logre una institucionalización de manera más sostenida, más permanente”, manifiesta.
También destaca el “relanzamiento” de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), “que ha sido iniciativa” de los presidentes de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y de Argentina, Alberto Fernández, algo que también es “visto con gran simpatía por Chile”.
“Creo que es una buena señal, recuperar el legado de Unasur porque hubo una larga historia y hay muchas cosas que están ahí como la integración en infraestructura (…) la cooperación en materia de salud”, añade Espinosa.
En ese sentido, concluye que relanzar “con fuerza” estos mecanismos de integración es «clave“ a pesar de las tensiones, de los desafíos en las economías de América Latina y del impacto que tuvo la pandemia de covid-19”. (EFE)