Apnea obstructiva del sueño y riesgo de demencia
Unos especialistas han investigado si hay relación entre sufrir apnea obstructiva del sueño y tener un riesgo mayor de desarrollar alguna demencia en el futuro, en comparación con las personas que no sufren la apnea.
El estudio lo ha llevado a cabo el equipo de la Dra. Melinda Jackson, del Instituto Turner de Salud Mental y Cerebral, adscrito a la Universidad Monash en Australia.
La apnea obstructiva del sueño es un trastorno común del sueño que afecta a unos 1.000 millones de personas en el mundo y que se debe al bloqueo de las vías respiratorias mientras la persona duerme, lo que provoca caídas intermitentes en los niveles de oxígeno y deteriora mucho la calidad del sueño.
La nueva investigación se hizo sobre 34 sujetos con apnea obstructiva del sueño recientemente diagnosticada pero no tratada y 12 personas que no tenían síntomas de trastornos del sueño. Jackson y sus colegas escanearon los cerebros de los sujetos de estudio mediante tomografía por emisión de positrones (PET) y realizaron mediciones del sueño y de otros parámetros, además de recopilar datos demográficos y de otras clases.
El equipo de investigación encontró que una incidencia severa de la apnea obstructiva del sueño tiende a ir unida a un aumento nocivo en una proteína, llamada beta-amiloide, que se acumula en las paredes de las arterias del cerebro y aumenta el riesgo de demencia.
Las personas del grupo con apnea obstructiva del sueño, además de contar con esa acumulación nociva de beta-amiloide, tenían una menor eficiencia del sueño y menos tiempo dedicado a la fase N3 del sueño (una etapa en la que el cuerpo realiza importantes labores de regeneración).
Hallar esta relación entre sufrir apnea obstructiva del sueño y tener un mayor riesgo de sufrir demencia hace necesario investigar más detalladamente este vínculo, ya que lo que se descubra al respecto podría ser de ayuda para desarrollar nuevos tratamientos contra las distintas formas de demencia asociada al envejecimiento que cuentan con la acumulación nociva de beta-amiloide entre sus síntomas cerebrales principales. (Fuente: NCYT de Amazings)